En julio la producción de hidrocarburos líquidos de Petróleos Mexicanos (Pemex) se redujo en 10,000 barriles diarios en comparación con junio, y en 83,000 barriles frente a julio del año pasado, quedando en 1.772 millones de barriles diarios, de acuerdo con el reporte de estadísticas petroleras de la empresa divulgado este fin de semana.
En términos porcentuales, estas variaciones equivalen a descensos de 0.5% y 4.5%, respectivamen
Al interior, la producción de aceite perforó el piso de los 1.5 millones de barriles diarios por primera vez desde septiembre de 1979, para quedar en 1.497 millones de toneles. Ello significó una caída de mensual de 0.5% y una interanual de 4.9 por ciento.
En tanto, el bombeo de condensados que a lo largo del sexenio ha sido crucial para ralentizar la caída en la producción de líquidos se redujo 0.8% mensual y 2.4% interanual a 275,136 barriles diarios.
El bombeo total de líquidos hiló así siete meses marcando decrementos interanuales, quedando en su nivel más bajo desde abril del 2022 y de enero a julio acumuló una retracción de 4.5% a 1.797 millones de barriles diarios.
Esta cifra es 2.9% o 55,000 toneles diarios menor a la meta de 1.852 millones de barriles diarios para todo el 2024 que todavía el pasado 19 de julio ratificó el director, Octavio Romero, durante una presentación en la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Para poder cumplir esa proyección, Pemex precisa producir 1.928 millones de barriles diarios en promedio cada mes durante los últimos cinco meses del 2024, lo que implicaría elevar la producción en 130,000 barriles diarios respecto del promedio del enero-julio.
Pemex sólo ha podido rebasar la barrera de los 1.9 millones dos veces en el sexenio, en abril y mayo del 2023.