Asimismo, la institución financiera indicó que si bien esta meta (revisada a la baja desde 1.903 millones de barriles para 2022) se puede alcanzar con una aportación promedio anual de 366 mil barriles diarios de los nuevos campos así como una estabilización en la producción de otros yacimientos, las metas de producción de 1.971 y 2.063 para 2023 y 2024, respectivamente, son más retadoras sin descubrimientos importantes.
Del mismo modo, BBVA México resaltó que el incremento que se proyecta en la producción petrolera para los siguientes años requerirá mayores montos de inversión para exploración y producción. Esto a su vez se traduce en mayores presiones a las finanzas públicas; como una mayor inversión al Sistema Nacional de Refinación y apoyo gubernamental a Pemex.
Por otro lado, la producción petrolera de la Empresa Productiva del Estado (EPE) promedió 1.775 millones de barriles diarios; mientras que la producción petrolera de los nuevos yacimientos promedió 330 mil barriles diarios en comparación de los 288 mil del trimestre previo.