Monterrey, NL. El Proyecto del Presupuesto de Egresos de la Federación, asignado a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) pasó de 33,000 a 88,000 millones de pesos, lo cual no es suficiente para las necesidades de infraestructura de la red de distribución de todo el país, pues sólo se enfoca en cuatro o cinco proyectos, alertó Raúl Rodríguez Márquez, presidente del Consejo Consultivo del Agua.
"Parece ser que no le van a dar más recurso del que está destinado (a Conagua), a pesar de los grandes esfuerzos de aliados que tenemos en el ámbito legislativo, como el presidente de la Comisión de Recursos Hidráulicos, el diputado Rubén Muñoz. Lo que planteamos es un tema de sensibilización permanente de que la crisis (hídrica) llegó para quedarse, es cíclica, pero estamos ante un cambio climático en el mundo y no sabemos qué puede pasar".
"El tema de mantenimiento es de la mayor irresponsabilidad, las fugas en las redes de uso doméstico y público urbano que es del 40%, y en el Valle de México llega hasta el 50%, la mitad del agua se pierde porque es infraestructura de 30 a 40 años, ese tipo de obras no son atractivas para los gobernantes porque no se ven".
Así lo comentó Rodríguez Márquez, durante la presentación del libro Perspectivas del Agua en México, propuestas hacia la seguridad hídrica, evento al que convocó la Cámara de la Industria de Transformación de Nuevo León (Caintra).
Por ello, consideró necesario legislar en la Ley General de Aguas, que se requieren más de 80,000 millones de pesos para llevar agua a la población que no tiene, que son entre 10 a 12 millones de personas.
Y propuso, junto con la red del Agua de la UNAM, y Agua Capital, que se pueda concesionar la operación del servicio de agua y drenaje a la iniciativa privada, bajo un marco claro, debido a que se estima que en la mayoría de los municipios no se cobra el agua, porque se está pensando en la siguiente elección y la gente no paga porque no tiene esa cultura.
Cambio de paradigma
Por su parte, Fernando González Villarreal, coordinador técnico de la Red del Agua de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), expuso que "cuando se tienen crisis hídricas y se solucionan, como ocurrió en Nuevo León en los años 80, se olvidan del problema y consideran que es temporal; sin embargo en este momento es necesario actuar ante los signos claros de una nueva crisis global del agua, por ello se necesita un cambio de paradigma".
La seguridad hídrica, dijo, depende de garantizar el acceso al agua potable en cantidad y calidad adecuada y a un precio justo; asegurar los recursos hídricos para los ecosistemas; promover el abastecimiento adecuado para actividades productivas y salvaguardar las condiciones anteriores, incluso ante los efectos de los fenómenos hidro meteorológicos extremos.
La orientación estratégica, depende de aumentar la disponibilidad del agua y eficientar sus usos, por ejemplo, hacer un uso más eficiente a nivel cuenca; robustecer el sistema financiero del agua; fortalecer la gestión integrada del recurso; fortalecer la gobernanza del agua, por ejemplo, cuando se construyó la Presa de Cerro Prieto en 1983, se buscó recompensar a la gente que resultó afectada.
Destacó que es prioritario robustecer el sistema financiero del agua, con subsidios federales, estatales y municipales, pero estableciendo un sistema de tarifas y derechos de conexión, para apalancar proyectos de infraestructura hidráulica. Así como construir capacidad e impulsar la innovación.