«Cuando llegamos, nos encontramos con 852 riesgos críticos. Por primera vez se asignaron recursos para atenderlos, y a lo largo de este periodo se han reducido significativamente. Planeamos concluir con cero riesgos críticos», destacó Romero Oropeza.
De los riesgos identificados, 699 ya han sido mitigados, representando un avance del 82% hacia el objetivo final. Se espera que para finales de 2024, todos los riesgos estén completamente controlados.
Entre las medidas adoptadas se encuentra un programa especial para tapar 940 pozos no productivos, priorizando aquellos de mayor riesgo por su cercanía a poblaciones y cuerpos de agua.
Además de mejorar la seguridad, PEMEX se ha comprometido a combatir la corrupción y promover el desarrollo sustentable de las comunidades impactadas por sus operaciones.
Romero Oropeza subrayó que estas acciones no solo protegen el medio ambiente y aseguran la operatividad segura, sino que también fortalecen a PEMEX como una empresa responsable y productiva, alineada con los objetivos nacionales y las expectativas sociales.
