Este aumento implica que Pemex ahora concentra el 87.5% de las ventas de gasolina a nivel nacional, un aumento significativo respecto al 80% registrado en su punto más bajo. En el segmento del diésel, la participación de mercado también ha crecido del 69% al 80%.
De las 7,257 estaciones, 7,212 son operadas por terceros y 45 son de propiedad de Pemex Transformación Industrial (PTI). Además, hay 1,132 estaciones bajo el esquema de sublicenciamiento de marca, mientras que 4,112 estaciones funcionan con marcas distintas a Pemex pero utilizan sus combustibles.
El director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza, indicó que, antes de la reforma energética, existían 12,500 estaciones de servicio de la marca, pero la entrada de nuevos competidores resultó en la pérdida de 6,000 franquicias.
Romero Oropeza también enfatizó que Pemex está enfocándose en fortalecer sus ventas internas, procesando toda la materia prima en México y asegurando que el 100% de sus ingresos provenga de las ventas nacionales, en lugar de exportar materia prima al extranjero.
Esta estrategia busca consolidar a Pemex como un líder en el mercado energético nacional y mejorar su competitividad frente a los nuevos actores en la industria.
