La posible desaparición de los órganos reguladores en materia energética de México, como la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), podría poner en riesgo el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), según Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA.
Actualmente, se discute en la Cámara de Diputados una reforma que busca transferir las funciones de estos organismos a la Secretaría de Energía (SENER), eliminando la autonomía de los reguladores, lo que pone en entredicho la capacidad del estado mexicano de ser imparcial en el apoyo que se le da a Petróleos Mexicanos (PEMEX) y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
En un webinar organizado por el ITAM, Serrano destacó que la autonomía de los reguladores es esencial, ya que juegan un papel de árbitro imparcial entre empresas públicas y privadas. La falta de imparcialidad generaría incertidumbre en las empresas que han invertido en el sector energético bajo la premisa de reglas claras y justas.
Uno de los mayores riesgos de eliminar la CRE y la CNH es que México estaría violando el T-MEC, que exige reguladores autónomos para evitar dar preferencia a empresas locales, ya sean públicas o privadas. Serrano enfatizó que el tratado es crucial para el crecimiento económico de México y su capacidad para atraer inversiones extranjeras, especialmente de Estados Unidos y Canadá.
Serrano también advirtió que darle a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) el 54% del mercado podría generar un impacto negativo tanto en la inversión privada como en la economía del país, ya que se eliminaría la competencia justa entre jugadores públicos y privados.
Para Serrano, la desaparición de estos órganos reguladores no solo afectaría la inversión privada, sino que también socavaría uno de los instrumentos clave que tiene México para crecer económicamente: el T-MEC.