Petróleos Mexicanos (PEMEX) ha decidido potenciar el desarrollo del campo Bakté, ubicado en Tabasco, con una ambiciosa inversión que asciende a 1,000 millones de dólares, lo que supera en 188% el monto original previsto.
El nuevo plan de transición propuesto por PEMEX fue avalado por la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), para resaltar el valor estratégico de esta reserva de gas natural.
Bakté es un activo crucial para la producción de gas en México. La expectativa apunta a una producción de 53.27 mil barriles diarios de condensado y 662.15 millones de pies cúbicos diarios de gas.
"Es uno de los campos más grandes que se ha descubierto. Estamos hablando de un campo de gas, la producción va a llegar a más de 600 millones de pies cúbicos diarios. Esto representa el 15% de la producción nacional y es el gas que requieren 10 centrales eléctricas, estamos hablando algo verdaderamente importante". Así lo destacó Héctor Moreira Rodríguez, comisionado de la CNH.
El plan actualizado incluye una expansión significativa en las operaciones del campo. Se perforarán nueve pozos nuevos, se completarán 13 pozos existentes, se construirán cuatro instalaciones adicionales y se instalarán 10 ductos para optimizar la extracción y transporte del gas. Con estas modificaciones, el costo total del proyecto se incrementa en 653.37 millones de dólares, alcanzando un presupuesto total de mil millones 160 mil dólares.
Además, Pascual subrayó la importancia de este proyecto en conjunto con la refinería Olmeca, lo que refleja la coherencia de las inversiones de Pemex. Ante la relevancia del campo Bakté, los comisionados aseguraron que se mantendrá un monitoreo cercano para garantizar el éxito de las actividades planificadas.