El Gobierno de México ha iniciado una venta de bonos por 1,500 millones de dólares, con vencimiento en 2041 y un rendimiento inicial estimado de 7.625%, según informó Bloomberg. Los fondos obtenidos se utilizarán para pagar un préstamo puente que financió la adquisición de 13 plantas de energía de Iberdrola por un monto de 6,200 millones de dólares, en una operación estructurada a través de Fiemex Energía, un vehículo del sector privado.
Los bancos involucrados en la emisión del préstamo puente incluyen a Barclays, Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), Santander y SMBC Nikko, quienes actúan como bookrunners. La deuda ha sido calificada con grado de inversión por las principales agencias de crédito.
En el contexto económico actual, algunos inversionistas extranjeros han comenzado a retirarse de activos mexicanos, preocupados por la inestabilidad del peso y las reformas judiciales propuestas. Además, las leyes que rigen la emisión y los pagarés están bajo la jurisdicción de Nueva York, mientras que otros documentos se ajustarán a la legislación mexicana.