La calificadora explicó que el 17 de diciembre de 2024, S&P Global Ratings colocó sus calificaciones de deuda de largo plazo en escala nacional CaVal de tres clases preferentes y de seis clases subordinadas respaldadas por créditos hipotecarios residenciales (RMBS, por sus siglas en inglés) originados y administrados por el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit; calificaciones en escala global: BBB/Negativa/A-2; calificaciones en escala nacional: mxAAA/Estable/mxA-1+) en el listado de Revisión Especial (CreditWatch) con implicaciones negativas.
Estas series corresponden a tres transacciones bajo los programas denominados CDVITOT, que se colocaron entre 2011 y 2015.
Las acciones de calificación se dan tras el anuncio realizado por el Infonavit con el objeto de modificar la tasa de indexación utilizada para los créditos, que inicialmente se originaron en Veces Salario Mínimo (VSM), que sirven como fuente de repago de los certificados. Bajo dicha modificación, a partir de enero de 2025, la tasa de indexación utilizada se fijará en una tasa de 0%, derivado de esto, tanto el saldo insoluto y las mensualidades de dichos créditos se mantendrán fijas.
Por otro lado, las clases que calificamos se encuentran denominadas en UDIs, por lo que su balance se actualiza conforme a la inflación. En nuestra opinión, dichas modificaciones expondrían a las transacciones a un mayor descalce derivado de la denominación de los activos (ahora fijos) y los pasivos (en UDIs).
Es importante señalar que las transacciones ya enfrentaban un descalce derivado de la denominación inicial de los activos (VSM) y la de los pasivos, el cual estaba considerado en nuestro análisis de acuerdo con nuestra metodología para calificar transacciones respaldadas por créditos hipotecarios.
Sin embargo, «en nuestra opinión, el hecho de que la tasa de indexación del activo se mantenga fija, podría limitar su capacidad para soportar pérdidas bajo los escenarios de estrés consistentes con su actual nivel de calificación».