Así lo explicó el administrador general de la AMBU, Jorge Eduardo Villaseñor Pérez, quien mencionó que este museo natural tiene el objetivo de sumar a la investigación, conservación y educación ambiental de la ciudadanía.
El director general de Recursos Naturales de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial, Juan José Llamas, enfatizó que el Arboretum es un referente del trabajo colaborativo entre la ciudadanía y las distintas instituciones que participaron.
Sobre este objetivo, la directora del Imeplan, Martha Patricia Martínez Barba, mencionó que desde la instancia técnica de planeación se está trabajando en la actualización de la Caracterización del Arbolado Urbano y Áreas Verdes para el Área Metropolitana de Guadalajara; dicho documento contendrá datos actualizados sobre el inventario del patrimonio natural en los nueve municipios metropolitanos, parte del legado público para las comunidades.
Algunos ejemplos de árboles patrimoniales famosos del género ficus en el Área Metropolitana de Guadalajara, son: El Árbol del Vampiro del Panteón de Belén, El árbol que caminó del Parque Metropolitano y El Zalate de la Garita de Piedras Negras en la Col. El Retiro de Guadalajara, entre otros.
Para la instalación del Arboretum, se seleccionaron ocho especies presentes en Jalisco:
Higuera negra (Ficus crocata) Higuera blanca (Ficus insipida) Camichin (Ficus pertusa) Jalamate (Ficus velutina) Aguacatillo (Ficus obtusifolia) Amate caballo (Ficus maxima) Texcalame (Ficus petiolaris) Zalatillo (Ficus pringlei) Estos árboles contribuyen de manera significativa a la conservación de las funciones ecosistémicas ya que se constituyen como hábitat y son proveedores de alimento para la fauna silvestre, principalmente aves y murciélagos, además de que aportan a la conservación del suelo, la estética del paisaje y el uso socioambiental de las áreas verdes.
Los ejemplares que integran el Arboretum Ficus de Jalisco en el Bosque Urbano Tlaquepaque pueden llegar a medir entre 10 a 20 metros de altura en su edad adulta.