El presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) reiteró su interés de trabajar junto con el gobierno y respetando la participación que tenga la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Sobre la participación el Ejército seremos colaborativos, aunque decimos que estamos listos para construir la totalidad de las obras porque tenemos la experiencia y se deben apostar a concesiones, inversiones mixtas, toda vez que no hay dinero público que alcance, comentó.
En su discurso de toma de protesta, la Mandataria recordó que se ampliará el Tren Maya a Puerto Progreso, en Yucatán, que se terminará la Línea K del Tren Interoceánico, que va de Ciudad Ixtepec a Ciudad Hidalgo, en la frontera con Guatemala, que habrá nuevos trenes de pasajeros.
Además, seguirá con el programa de caminos artesanales para conectar comunidades y con la construcción de puertos, aeropuertos y carreteras que generen desarrollo con bienestar y al mismo tiempo fortalezcan la infraestructura y conectividad en nuestro país y potencien la inversión y que en breve lanzará un plan nacional de energía. También prometió labores de bacheo en al menos 4,000 kilómetros de carreteras federales.
El discurso de la presidenta nos motivó por todo lo que comentó de ampliar infraestructura logística, de energía, hídrica o vivienda, que es lo que hemos dicho se requiere. Estamos confiados en que bajo su liderazgo el país iniciará una nueva etapa de desarrollo sostenible e incluyente, agregó el empresario.
Inversión privada.
En la toma de protesta de este martes, también se habló de promover la inversión y la inversión privada. Lo digo con toda claridad: tengan la certeza que las inversiones de accionistas nacionales y extranjeros estarán seguras en nuestro país, refirió Claudia Sheinbaum.
Y una de las alternativas de participación empresarial son las asociaciones público-privadas (APP), que en el caso del sector carretero no fueron utilizadas durante el anterior sexenio, periodo en el que también se disminuyó el presupuesto público para su conservación.
No hay duda, el sistema nervioso de la productividad en el país son las carreteras por la cantidad de carga que pasa por ahí. El 70% está en malas condiciones y el dinero que se dedica para ponerlas a punto no alcanza ni avanza con el mismo ritmo que se requiere. Una opción para mejorar en el tema son las concesiones y con otro tipo de esquemas siempre en total transparencia para mostrar su beneficio, agregó Méndez Jaled.
De acuerdo al gobierno anterior, en los siguientes cinco años se requerirán unos 140,000 millones de pesos para programas de conservación carretera y ante la escasez de recursos se optó por el desdoblamiento de tres activos carreteros (modificación de su título de concesión a costa de extender, modificar o generar un nuevo tramo de autopista) y con ellos pudieron meter 1,800 millones de pesos directamente a la conservación de carreteras.
En consecuencia, el presidente de la CMIC espera tener a la brevedad un encuentro con las nuevas autoridades del sector y manifestar a detalle sus propuestas para el desarrollo de infraestructura, incluida la creación de un instituto u órgano colegiado responsable de planear obras con visión de largo plazo.