El anteproyecto sienta las bases para regular los sistemas de almacenamiento de energía, mismos que tienen el objetivo de inyectar electricidad de forma constante a la red del SEN, y que fue generada a partir de fuentes renovables.
El anteproyecto tiene un alto impacto regulatorio, por lo que se sujetará al proceso normal de dictaminación.
Entre las nuevas obligaciones para los Sistemas de Almacenamiento de Energía, el anteproyecto estipula solicitar un nuevo permiso, o bien, modificar el permiso vigente; cumplir con el proceso de interconexión correspondiente; cargar el SAE con la central de generación variable; así como atender la variabilidad de la fuente primaria y cumplir con los criterios de eficiencia, calidad, confiabilidad, continuidad, seguridad y sostenibilidad del SEN, establecidos en el Código de Red.
Además, para las centrales de abasto aislado, los SAE deberán certificar que cuentan con la infraestructura que asegure que no existirá inyección de energía eléctrica a la Red Nacional de Transmisión ni a las Redes Generales de Distribución.