La División Sureste de la CFE participa activamente en cinco proyectos presidenciales: está electrificando la Refinería Olmeca Dos Bocas, el tramo 1 del Tren Maya y el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec. Tiene a su cargo el equipamiento del 43% de todas las sucursales del Banco del Bienestar en el país (170 de 400 sucursales).
Además, para el programa Internet para Todos, la Comisión ha instalado ya, en una primera etapa, 1,838 puntos de acceso 807 están en proceso y construye 290 torres de telecomunicaciones el 18% de las consideradas a nivel nacional.
En su intervención, la secretaria de Energía, Rocío Nahle, aclaró que la actual administración y sus funcionarios no defienden a PEMEX y CFE solo por ideología nacionalista, sino por algo que conviene a todos los mexicanos: la soberanía energética, la cual está vinculada a la soberanía nacional.
Agradeció la contribución del personal de la CFE, quienes destacan por su calidad y son parte fundamental de todos los proyectos prioritarios del gobierno federal. Son una pieza indispensable para México, tanto en los proyectos de hoy como en los de ayer, y en los futuros. Destacó que se ha vuelto a invertir en la CFE, después de que se había planeado que dejara el sector eléctrico en manos de las empresas privadas.
Mientras que Manuel Bartlett, director general de la paraestatal, destacó por su parte el apoyo que la empresa ha recibido de Rocío Nahle en su calidad de presidenta del Consejo de Administración de la CFE. Sin su aportación y su mano firme, apuntó, no se habría podido fortalecer a la empresa.
Recordó también la lucha que dio, desde el Senado, contra la reforma energética de 2013, cuyo fin era entregar los bienes energéticos de la nación a intereses extranjeros que buscan hacer negocio, no el servicio público. De no haberse evitado, si se hubiera preservado el sistema donde mediante argucias legales no se despachaba la electricidad producida por la CFE, ésta hubiera desaparecido al final de este sexenio.
Por fortuna, recordó, el movimiento encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador pudo evitarlo. Además, se dio la instrucción de rescatar a la CFE y es lo que se ha hecho. "Vamos a dejar una CFE fortalecida, con generación suficiente para competir con quien sea y prevenir que no se nos despache", celebró.
Bartlett Díaz destacó que la CFE será cada vez más fuerte, impulsada por el compromiso y esmero de su personal. Será entregada como la empresa más importante del país en el ramo de la distribución y comercialización de combustibles. Construye nuevas plantas de generación, con distintos tipos de tecnología, a lo largo de todo México entre las que destaca la planta fotovoltaica de Puerto Peñasco. Está renovando la maquinaria de sus hidroeléctricas.
Como ejemplo del valor del personal de la CFE, el director general señaló la construcción de todo un sistema eléctrico en la selva de la Península de Yucatán, donde antes no había nada, para alimentar el recorrido y las instalaciones del Tren Maya: "tres o cuatro países de Europa caben ahí y ustedes están construyendo todo un sistema eléctrico".
Para concluir, Manuel Bartlett invitó al personal de la CFE a tener conciencia política: fue fundada para servir al país, pero persiste la amenaza de los traidores que buscan entregar el país a los intereses extranjeros. Para conjurarla, el país necesita que la familia CFEísta siga defendiendo a la empresa: "México se los agradece, el presidente lo reconoce todos los días. Necesitamos que esta empresa viva, que viva la CFE para siempre".