Entre enero y julio de este, la producción de vivienda en México registró una caída de 8.5 por ciento anual, con 71 mil 469 casas, de acuerdo con el Registro Único de Vivienda (RUV).
Esta disminución, causada por mayores precios de los materiales de construcción, la falta de tierra y de servicios como el agua, podría continuar hasta 2025, señaló Jorge Paredes, director de la consultora Realty World.
«A partir de 2025 se podría comenzar a observar en el mercado mayor oferta de vivienda y menores precios», anticipó.
Consideró que la escasez y el encarecimiento de la tierra impactan más al desarrollo de vivienda que a otros segmentos, como la edificación de parques industriales, por ejemplo.
Del total de vivienda que se produjo en el País durante el periodo mencionado, 73.5 por ciento corresponde a vivienda horizontal.
La entidad con mayor producción es Nuevo León con 11 mil 878 casas, una caída anual de 10 por ciento, según el RUV.
El segundo estado con más construcción de casas fue Jalisco, con 6 mil 373, que también registró baja caída de 7 por ciento;seguido del Estado de México, con 4 mil 871 casas, 3.3 por ciento menos que en el mismo periodo de 2022.
Para Paredes, el hecho de que se esté construyendo más vivienda vertical en el País obedece a la carestía que hay de tierra.
«Ciudades en donde no veíamos muchos edificios como Saltillo, ya se ven más proyectos verticales», apuntó.
El especialista advirtió que la falta de oferta de vivienda provoca que las unidades disponibles sean más caras.
Al primer semestre del año, el precio de la vivienda a través de crédito hipotecario subió 11.6 por ciento, según datos de Sociedad Hipotecaria Federal (SHF).
Baja California Sur, Quintana Roo y Sinaloa fueron las entidades que reportaron mayor aumento.
Por otra parte, el especialista destacó que las tasas de interés están mermando la capacidad de compra de vivienda en la población, en donde los más afectados son los sectores bajos.
«Las tasas están altas y la industria está esperando es que el Banco de México las baje esto a razón de que la inflación ha disminuido y que era lo que estaba justificando su alza. Las tasas se han mantenido en 11.25, pero ya era para que hubieran bajando», criticó.